Un grupo de normalización quiere explorar el uso de conexiones ópticas para mejorar la tecnología PCIe, que actualmente se basa en señales eléctricas.
Las nuevas generaciones de tecnología PCI Express, la interfaz que se utiliza en todos los componentes de PC, ya están en camino. Pero para acelerar aún más las velocidades y el ancho de banda, la industria tecnológica quiere estudiar si la interfaz PCIe podría incorporar algún día conexiones ópticas.
El miércoles, el grupo de normalización PCI-SIG anunció que está formando un nuevo grupo de trabajo «para ofrecer tecnología PCIe a través de conexiones ópticas».
La industria del PC está desplegando actualmente PCIe 5 en placas base y unidades SSD. Al mismo tiempo, PCIe 7.0 ya está en la mesa de dibujo con el objetivo de ofrecer un ancho de banda bidireccional de hasta 512 GB/s cuando empiece a desplegarse, probablemente en 2027.
Aun así, la interfaz PCIe podría enfrentarse a retos a la hora de alcanzar umbrales de velocidad más elevados. Actualmente, la interfaz se basa en señales eléctricas enviadas a través de cables y clavijas de cobre. Pero el sistema resultante puede generar calor, sobre todo a velocidades más altas.
En cambio, los conectores ópticos pueden ofrecer velocidades aún mayores utilizando señales luminosas para transmitir datos. Los conectores tampoco generan calor. Por eso, PCI-SIG afirma que el sector está muy interesado en explorar esta tecnología.
«Las conexiones ópticas serán un avance importante para la arquitectura PCIe, ya que permitirán un mayor rendimiento, un menor consumo de energía, un mayor alcance y una latencia reducida», declaró a PCI-SIG Nathan Brookwood, investigador de la consultora Insight 64.
El objetivo es hacer que la interfaz PCIe basada en tecnología óptica sea «agnóstica», de modo que los fabricantes puedan adoptarla fácilmente para sus propios productos. Entre los miembros de PCI-SIG figuran Apple, Arm, Intel, Nvidia y Samsung. Si la interfaz PCIe óptica se hace realidad, es probable que se utilice primero en sistemas empresariales como superordenadores y centros de datos, donde las exigencias de velocidad y ancho de banda son muy superiores a las de los productos de consumo.