Si estás pensando en invertir en un nuevo ultrabook, tableta o portátil para juegos, es posible que te hayas topado con las unidades M.2 SSD. Pero, ¿qué son?
Las unidades M.2 SSD, que se encuentran en todo tipo de dispositivos, desde tabletas delgadas hasta la PS5, son cada vez más populares por diversas razones.
Hemos elaborado esta guía para explicarte todo lo que necesitas saber sobre las unidades M.2 SSD, incluyendo qué son y en qué se diferencian de las unidades SSD y HDD estándar.
¿Qué es una unidad M.2 SSD?
Las unidades M.2 SSD son alternativas más pequeñas a las unidades de estado sólido (SSD) estándar de 2,5 pulgadas. Suelen encontrarse en dispositivos delgados como tabletas, ultrabooks y portátiles ligeros para juegos, gracias a su forma rectangular y delgada.
Sin embargo, aunque las M.2 sean pequeñas, esto no significa que no sean potentes. De hecho, algunas de las unidades SSD más rápidas disponibles actualmente utilizan el formato M.2.
Las M.2 SSD tienen el potencial de mejorar todo, desde los tiempos de arranque hasta los tiempos de carga en un videojuego, en comparación con las unidades de disco duro (HDD) tradicionales, gracias a las mayores velocidades de lectura y escritura.
El pequeño tamaño de un SSD M.2 también hace que sea más adecuado para dispositivos más pequeños, aunque también se pueden encontrar en ordenadores más grandes e incluso se pueden utilizar como almacenamiento ampliable en la PS5.
¿Cómo se comparan con las unidades SSD de 2,5 pulgadas?
Las M.2 SSD no solo son más compactas que sus homólogas de 2,5 pulgadas, sino que también pueden ser más rápidas.
A diferencia de las SSD de 2,5 pulgadas, que dependen del bus SATA utilizado por los discos duros, las M.2 SSD también pueden soportar el bus PCIe (utilizado normalmente por las tarjetas complementarias), que es más rápido y ofrece un mayor ancho de banda.
Las M.2 SSD que utilizan PCIe también pueden ser compatibles con el protocolo NVMe de alto rendimiento, dependiendo del modelo que compres.
Optar por una M.2 SSD no garantiza automáticamente una mayor velocidad. Todo depende del tipo que elijas, ya sea SATA, PCIe o PCIe compatible con NVMe. De hecho, los resultados pueden variar drásticamente en este sentido.
Por lo general, las unidades M.2 SSD SATA están limitadas a velocidades de lectura máximas de 600 MB/s, mientras que las últimas unidades M.2 SSD PCI 4.0 NVMe pueden ofrecer velocidades de lectura de hasta 7000 MB/s. Esto significa que las aplicaciones se abrirán más rápido, los archivos se instalarán más rápido y los jugadores verán enormes reducciones en el tiempo que pasan en las pantallas de carga.
Por otro lado, las M.2 SSD no siempre pueden ofrecer la misma capacidad que las tarjetas SSD más grandes de 2,5 pulgadas. Suelen estar limitadas a 2 TB de almacenamiento, mientras que las SSD pueden llegar hasta los 100 TB en casos excepcionales.
¿Puedo utilizar una M.2 SSD en mi PC?
Si quieres invertir en una M.2 SSD, tendrás que asegurarte de que tienes una placa base compatible con la ranura M.2 y con el estándar de SSD correspondiente (por ejemplo, PCIe 3.0, PCIe 4.0, etc.).
Si dispones de varias ranuras, tienes la opción de ejecutar más de una unidad M.2 SSD simultáneamente en RAID, lo que podría permitirte superar el límite de almacenamiento de 2 TB. Sin embargo, las unidades M.2 SSD no son baratas, por lo que te recomendamos que investigues antes de actualizar tu ordenador.